Marc Márquez, un ojo por pintar

Un daruma es un muñeco de una figura tradicional japonesa, está inspirada en un monje budista, Bodhidharma, que tiene una forma redonda, sin brazos ni piernas, pero con una base inferior. De este modo, se pone de pie siempre al ser volcado. Es el amuleto de los deseos en Japón. Para ello, se pinta el ojo izquierdo cuando se quiere cumplir un objetivo y, al lograrlo, se pinta el derecho. Por lo tanto, significa la perseverancia, el éxito y la capacidad de recuperarse ante la adversidad.En septiembre del año pasado, Marc Márquez encargó su casco especial a Shoei, su marca nipona, en el que se diseñaron un daruma, sin duda algo muy adecuado a su situación tras sobrevivir a sus lesiones y regresar con una meta clara: el noveno entorchado.

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